Sin pecado concebido es una telenovela mexicana producida por José Alberto Castro para Televisa en 2001. Está protagonizada por Angélica Rivera, Carlos Ponce y la participacion antagonica de Itatí Cantoral y el primer actor Sergio Goyri.
La historia se desarrolla en la hacienda ‘La Encantada’, ubicada en la conservadora ciudad de Puebla. Ahí viven Claudio y Amparo Martorel, dueños de una importante empresa de perfumes. Con ellos vive Adrián, su hijo, quien acaba de regresar de Chicago, donde estudió una maestría. Adrián está comprometido con Raquel, una muchacha frívola e interesada que está aliada con Álvaro, el chofer de Claudio, y lo único que desea es la posición y el dinero de Adrián. Este, a su regreso, se ha reencontrado con Mariana, el amor de su infancia. Mariana, inteligente, bonita y bondadosa, vivía en ‘La Encantada’ pero huyó de ahí sin dar explicaciones y se refugió en un internado con la idea de convertirse en monja. Sin embargo, al morir su padre, decide regresar. Adrián y Mariana se dan cuenta de que nunca se dejaron de querer, pero entre ellos está Raquel, quien no se detendrá ante nada para separarlos. Emiliano, a pesar de tener dinero y vivir muy bien con su familia, siempre ha sentido un odio inmenso por su hermano Claudio. Claudio sostiene una relación clandestina con una bella modelo llamada Montserrat que lo ama sinceramente. Amparo, al darse cuenta de la infidelidad de su esposo, le pide el divorcio y decide retomar su lugar en la empresa. Mariana ha tratado de mantenerse alejada de Adrián, pero él jura que deshará su compromiso con Raquel para casarse con ella. Raquel, en su desesperación, inventa que está embarazada de Adrián, cuando la realidad es que el hijo es de otro. Salud apoya a su nieta a pesar de saber que su matrimonio con Adrián estará basado en un engaño.
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